Roberto Orellana

Nació en agosto de 1963. Sus padres son el señor Mateo Orellana y la señora María Leonor Sánchez de Orellana. Estudiaba 8° grado en el Instituto Nacional Francisco Menéndez por la noche.

Ingreso a la comunidad cristiana en el año de 1975. Durante el día trabajaba con su padre y por la noche estudiaba, y los fines de semana se dedicaba a trabajar en la comunidad.

Era un joven muy recto al hablar, reflexivo, muy responsable lo cual lo demostraba con su puntualidad, muy sacrificado.

Su testimonio y sus palabras hacían reflexionar a muchos incluso a los adultos; como cuando en una ocasión hablando de los malos pastores les enfrentó diciendo: “No se trata en el texto de los malos sacerdotes de aquel tiempo sino de nosotros. Qué estamos haciendo por la liberación de nuestro pueblo, hay muchos que nos necesitan para que les demos siquiera una voz de aliento y muchos de nosotros nos quedamos bien tranquilos acostados y viendo televisión. Como cristianos tenemos que caminar, no esperar que nos vengas a llamar”.

A pesar de sus escasos 15 años era considerado muy valioso por su modo de actuar y de reflexionar hasta dar aliento. Por sus cualidades fue nombrado miembro del equipo de la Pastoral Juvenil de la comunidad y representante del equipo de jóvenes ante el equipo local de adultos.